Preguntas frecuentes (FAQ's)
Iniciar una actividad empresarial supone un proceso de toma de decisiones que comienzan por elegir la denominación social, la forma jurídica (por ejemplo, Sociedad Limitada o Anónima), el capital a invertir y el domicilio social.
Antes de iniciar una actividad económica, para poder limitar tu responsabilidad es aconsejable que crees una sociedad. Lo primero que tendrás que hacer es escoger el tipo de sociedad que más se adapte a tu proyecto empresarial:
Si quieres constituir una empresa con varias personas, la Sociedad Limitada es una buena opción, dado que requiere un capital social de 1€, por lo que no supone un gran esfuerzo económico inicial para los socios.
En caso de que quieras iniciar tu actividad de forma individual, puedes recurrir a la Sociedad Limitada Unipersonal, que se caracteriza por tener un único socio capitalista. Se le aplican todas las reglas de la sociedad limitada, salvo la división de las participaciones sociales, que se concentran en un único socio.
Si eres un profesional colegiado y vas a prestar servicios solo o conjuntamente con otros compañeros de profesión, puedes crear una Sociedad Limitada Profesional. Puede estar formada por socios profesionales, esto es, que tengan la licencia necesaria para ejercer la actividad principal de la empresa (por ejemplo, estar dado de alta en el Colegio de abogados); y también por socios no profesionales que, aun no teniendo la licencia para ejercer la profesión, pueden contribuir de otra forma, como aportando bienes o capital.
En estos ejemplos, los socios no responden personalmente de las deudas sociales, son las llamadas sociedades capitalistas. Existen otros tipos de sociedades en las que los socios sí responden de las deudas sociales con su propio patrimonio de forma ilimitada, como las sociedades civiles, las comanditarias y las comanditarias por acciones. Con la sociedad civil, pondrás dinero en común, bienes o industria y podrás repartir las ganancias obtenidas entre los socios.
Si decides ejercer una actividad económica en nombre propio, asumiendo el control y riesgo derivado de tu actividad, los pasos iniciales que debes seguir incluyen:
Elegir un nombre comercial, o bien puedes ejercer utilizando tu nombre y apellidos.
Alta en la Seguridad Social: la solicitud para darse de alta en el régimen de autónomos se debe hacer hasta 60 días naturales antes. En el momento del alta tendrás que elegir una base de cotización, que podrás cambiar después en función de tus ingresos mensuales. Actualmente los nuevos autónomos pagarán una cuota de 60€ al mes durante el primer año de actividad, prorrogable por un año más en caso de no superar el SMI.
Alta en Hacienda: Deberás darte de alta antes de iniciar la actividad presentando los modelos 036 o 037 que son una declaración censal para comunicar tus datos, la actividad que vas realizar, si tienes local, los impuestos que deberás presentar, etc. o comenzarás a pagar cuota de autónomos hasta que no realices el alta en Hacienda. Este será el momento en que se considerará que comienzas tu actividad y puedes comenzar a emitir facturas válidamente.
Licencias en los ayuntamientos de apertura y obras: Debes aportar la memoria del proyecto de la obra o reforma en el local, firmado por el jefe de proyecto, así como una declaración responsable.
A medida que la empresa va desarrollando su actividad en el mercado, es necesario realizar modificaciones para adaptar su estructura, su capital social, su administración, su denominación o su domicilio social, entre otras.
Como socio, puedes tomar decisiones para conseguir el mejor funcionamiento de tu empresa y alcanzar los objetivos del plan de negocios. La Junta de socios es el órgano en el que participan todos los propietarios de acciones o participaciones y deliberan sobre cuestiones recogidas en los Estatutos sociales. Para poder ejecutar las decisiones adoptadas en la Junta, es necesario llegar a un acuerdo por mayoría de votos. Todas las deliberaciones y acuerdos de la Junta deberán recogerse en actas firmadas por el presidente y el secretario y posteriormente incorporarse a un libro de actas. Convocar las Juntas, redactar las actas y firmarlas será mucho más fácil con uno de nuestros modelos disponibles en Rocket Lawyer:
Acta de Junta general ordinaria.
Acta de Junta extraordinaria.
Acta de la Junta modificando el objeto social.
Acta Junta general aprobando cuentas anuales.
Acta de la Junta de cese y nombramiento administrador.
Acta de la Junta modificando el domicilio social.
Acta junta general de ampliación de capital
Certificación de acuerdos de Junta.
Si vas a iniciar tu actividad profesional, puedes crear una página web para ayudarte a difundir tu marca en el mercado y conseguir clientes. Si por el contrario ya tienes una empresa en funcionamiento y quieres expandir tu negocio, vender tus productos o servicios a través de una página web puede ser la clave para conseguir mejores resultados.
Cuando ofrezcas tus bienes o servicios en la web, es necesario que incluyas unos Términos y condiciones que incluyan las condiciones de servicio, de envío, devolución, reembolso y desistimiento; así como un Aviso Legal y una Política de Privacidad. Con estos documentos cumplirás con tu obligación de información y evitarás futuros problemas y malentendidos con tus clientes.
Debes cumplir con los requisitos y exigencias de la Ley de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD) y del Reglamento europeo de Protección de Datos (RGPD), que se aplica a empresarios autónomos y también a las empresas (sociedades mercantiles), asociaciones, fundaciones, etc.
Para cumplir con los clientes es necesario crear una Política de Privacidad, un texto de consentimiento para la recogida y cesión de datos personales y una política de cookies para tu página web. También necesitarás crear un Documento de Seguridad donde se incluyan los ficheros con los datos personales de tus clientes, cuyo acceso deberá estar regulado y restringido a los responsables de protección de datos y el Delegado de Protección de datos (DPD), cuando exista en la empresa. En todo caso deberá existir un responsable de protección de datos.
Para cumplir con el personal de la empresa, será necesario que tus trabajadores firmen un acuerdo de confidencialidad (NDA) e incluyan una cláusula de confidencialidad en sus e-mails o comunicaciones de la empresa.